Este juego de ajedrez fue realizado en la Fábrica de Cerámica San Isidro en 1967 y obtuvo el Premio Nacional del Concurso de Artesanía del Ajedrez celebrado en Madrid.
Se desconoce si la autoría es de Agustín Morales Alguacil debido a que, al igual que sucede con otras piezas, la inscripción no alude al artista que la realizó. Asimismo, es preciso señalar que el maestro ceramista en estos años estuvo ocupado colaborando con múltiples artistas, así como llevando a soporte cerámico obras de Miguel Ruiz del Castillo, Ladrón de Guevara, Eulalia Dolores de la Higuera y Gómez Montero, entre otros.
Ajedrez cuyo tablero está formado por azulejos cerámicos esmaltados en blanco con detalles de decoración vegetal, animal y geométrica en azul (azul cobalto), verde (óxido de cobre) y marrón (óxido de hierro), fijados a una base de madera. En su conjunto, la ornamentación del tablero sigue el modelo clásico de la cerámica granadina, recurriendo a referencias clásicas como los pájaros y pavos reales, las flores y granadas, entre otros.
Las figuras, torneadas y esmaltadas, se dividen en verdes y marrones. Los peones se realizan siguiendo los métodos de representación más tradicional, como también ocurre con los alfiles, caballos y torres, mientras que el rey y la reina son, en ambos colores, figuras antropomórficas.