Esta obra fue donada por Conesa, en 1985, al director de Extensión Cultural de la Universidad granadina, con motivo de la exposición celebrada en la Madraza.
Composición de agitado discurso de Paco Conesa, característica de su obra de principios de los años ochenta. En un desenfrenado barroquismo, tres cuerpos desnudos, aparentemente asexuados, se retuercen conformando un cerrado círculo de figuras autónomas. Sin mayor detalle que la propia configuración plástica de las figuras, el color, predominantemente verde y ocre matizados, ayuda a crear la sensual danza plena de ingravidez. El idealismo y la abstracción figurativa de Conesa están aquí muy presentes, en una obra donde los cuerpos invaden todo el espacio físico del cuadro, intentando desesperadamente escapar de su encierro.
Está firmado por su autor y fechado en color rojo, en el ángulo inferior izquierdo.