Se ignora su procedencia aunque según información oral fue adquirido en un comercio de antigüedades para la Facultad de Derecho a mediados del siglo XX junto a la Sagrada Familia formada por la escultura de la Virgen y San José (CHA00401.00.00). En origen pudo proceder de algún convento femenino, donde estas imágenes gozaban de gran predilección entre las religiosas.
Hasta el 2007 se exponía junto a la Virgen y San José en una cuna pero por la postura de su cuerpo queda claro que no está realizado para ocupar una cuna.
Espléndida imagen de Niño Jesús dormido realizado en madera policromada, aparece plácidamente dormido y recostado llevándose el dedo de la mano derecha a la boca, mientras mantiene extendido el otro brazo. Es una figura tallada con gran cuidado y maestría que nos presenta un niño rollizo con la característica proporcionalidad y dulzura de la escuela granadina. La policromía contribuye a realzar la bella imagen, con encarnaciones pulimentadas, típicamente dieciochescas, resaltando los frescores rosados del rostro y del cuerpo. Especial cuidado se ha tenido en la representación del cabello, escaso y pegado al casco, como debe ser en un niño recién nacido. En estas soluciones anatómicas que lo acercan al escultor Pedro de Mena