Este plato fue realizado en la Fábrica de Cerámica San Isidro de Granada en una fecha aproximada a 1980. En esta época, Agustín Morales Alguacil ya había consolidado su fama como maestro ceramista y, en mayo de 1977, fue nombrado por el rey Juan Carlos I "artesano ejemplar".
Plato modelado en arcilla, torneado en pella y horma y esmaltado en blanco con decoración repintada monocroma en marrón de óxido de manganeso. Está decorado enteramente con motivos vegetales que intercalan flores de girasol y, en el centro de la composición, una granada flanqueada por dos aves.