La pieza está datada en el siglo XX, sin fecha específica, y supone una muestra del legado de una dinastía artesana y artística que atesora siglos de trabajo alfarero. En la parte posterior aparece el nombre de Antonio Ruiz Cortés, que pudo haber sido un artesano de la fábrica y ejecutor de la pieza, o bien el comitente, el futuro comprador de la pieza o la persona a quien estuviera dedicada esta.
Esta fuente semillana o plato semillano forma parte de la Colección de Cerámica Agustín Morales Alguacil – Fábricas de San Isidro, compuesta por más de 400 piezas datadas entre los siglos XVI y XX y donada a la Universidad de Granada en abril de 2021.
La pieza está modelada en arcilla, torneada en pella y horma y esmaltada en blanco con decoración en azul cobalto.
El ala se decora mediante convexidades concéntricas de tamaño decreciente, rellenando los huecos entre curvas con formas cónicas en azul sólido. La composición ornamental de la torta centra el protagonismo en torno a un ave, a cuyo alrededor se organiza una densa capa decorativa a base de motivos vegetales sobre los que destacan cuatro flores abiertas, de pequeños pétalos superpuestos y el centro rematado en retícula.
El pavo real y las flores, la decoración vegetal y los esquemas geométricos repetitivos son algunas de las claves de la cerámica tradicional granadina, siguiendo esquemas ornamentales de la tradición de la artesanía nazarí.