Este plato está fechado en el siglo XIX, cerámica granadina que atesora siglos de trabajo alfarero generación tras generación.
Plato de cerámica realizado en arcilla torneada en pella de arcilla común y horma, esmaltado en blanco, con monococción en horno árabe, y decoración repintada monócroma en azul cobalto.
En torno a las alas, cuenta con cenefas a modo de guirnaldas, mientras que la torta se decora con motivos vegetales y florales que envuelven en la zona central dos corazones con los anagramas de Jesús y María.
Presenta pérdidas de esmalte en el borde.